¿Está su empresa preparada para la transición energética?

A estas alturas de la película ya nadie duda de que la transición energética hacia una economía cero en carbono está en marcha. Podemos diferir en los plazos y la manera de llegar a ella pero nadie podría hoy en duda que el camino está iniciado. Si alguien duda sólo tiene que darle un vistazo a la prensa diaria: países que empujan por ser el primero libre de energía fósil, compañías que ponen en marcha parques solares para autoabastecerse,  compañías eléctricas que se preparan para el autoconsumo en países empeñados en frenarlo. No es algo del futuro. Ya está pasando. Este escenario traerá cambios en la manera que las empresas producen y usan la energía. En los próximos años habrá cambios en el mundo energéticos comparables a lo que ha supuesto internet para las comunicaciones. Es tiempo de preparase y diseñar la estrategia energética óptima en un escenario en el que la optimización de costes y la sostenibilidad serán fundamentales.

¿qué cambios podemos esperar?

El proceso de innovación tecnológica está tomando una velocidad de vértigo lo que está haciendo difícil tener una vista completa y amplia de este proceso. Aún nos queda mucho por ver pero hay cambios que se pueden ir dibujando en el mapa del futuro:

  • Las fuentes de energía serán múltiples. La «democratización» de la energía y las renovables acabarán con el monopolio de suministro de las «utilities». Habrá industrias y empresas conectadas al grid pero esta no será la única forma de abastecimiento de energía . Habrá además fuentes de energía locales, zonales y/o de distrito. Puede haber placas solares en el techo, biogás a partir de residuos, energía térmica proveniente de otra industria cercana, energía proveniente de integración de servicios, almacenamiento eléctrico, etc. Las energías eléctrica y térmica no entrarán por conductos únicos.
  • La gestión de suministros se complica. La transición energética facilitará muchas cosas, pero no todo. Como consecuencia de la diversificación de suministros se complicará su gestión. Casar oferta y demanda dentro de las industrias será muy importante. La gestión de tarifas y su variabilidad requerirán de un fuerte grado de conocimiento en costes energéticos.
  • La reducción de emisiones es inevitable. Los compromisos de reducción de emisiones se están fortaleciendo en todo el mundo, lo que es un driver más para una rápida transición energética. La próxima cumbre de París traerá novedades y todo parece indicar que se acelerará el compromiso mundial para la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero.Y aún sin regulación por parte de los estados, las empresas con un buen gobierno se auto-impondrán una reducción de emisiones porque, entre otros, sus clientes se lo demandarán.
  • Los desarrollos tecnológicos irán de la mano de la eficiencia y las renovables. Vuelve el small is beatiful.  Microgeneración, motores eficientes, tecnología de almacenamiento. Ya no es más rápido, mas alto y más fuerte sino más eficiente, más limpio y más sostenible.
  • El coche eléctrico y la adaptación de motores a biogás han llegado para quedarse.En las ciudades y en las empresas, en los coches particulares y en las flotas empresariales, en los turismos y en los vehículos industriales. En todos los sectores se hacen avances cada día en motores eléctricos y motores mixtos.

¿cómo me preparo?

  • Conoce tus consumos. El avance tecnológico y el internet de las cosas han desarrollado y abaratado mucho la captación de datos energéticos. Las empresas tienen que conocer a fondo su patrón de consumo energético. Un inventario de equipos consumidores, su potencia real y cuándo se necesita esta energía.
  • Gestiona la energía. La energía tiene que gestionarse como una materia prima más no como un coste indirecto. Un proceso de mejora continua en el consumo energético no ayudará sólo a un ahorro económico sino que ayudará a detectar áreas de oportunidad en los procesos que repercutirán en toda la producción. La gestión de la energía implicará una gestión de la oferta y la demanda para casar las energías disponibles en los momentos que se demanda. Analizar, planear, ejecutar, gestionar.
  • Piensa en economía circular. Este concepto muy impulsado también en los programas de la Unión Europea parte de que lo que es un residuo en un sitio o proceso puede ser un insumo en otro. Puede ser dentro de una empresa en un proceso de intercambio de calor o puede ser entre empresas cercanas. Ayuda a reducir residuos, costes y mejorar procesos.
  • Mantente al día en la tecnología que necesitas. Si vas a cambiar equipo, piensa la tecnología. Los equipos que piensas adquirir ¿tienen la madurez tecnológica adecuada? ¿Son adaptables al futuro que viene? ¿Quedarán obsoletos mucho antes de  que acabe su vida útil? En definitiva vienen tiempos apasionantes que requerirán estar permanentemente al día.
  • Mantenimiento. Piensa bien la estrategia de mantenimiento de equipos. Seguramente el número de equipos a mantener sea cada vez mayor.  Los de la producción los de la generación, los de control, la conexión a internet. Piensa que equipos podrían contratarse como servicio y cuales son el core de la operación. Forma a tu equipo de mantenimiento y adáptalo a la transición.

Es el momento de empezar a prepararse. Va a requerir un esfuerzo adicional pero merecerá la pena en costes y el planeta lo agradecerá.


Abrir chat
Hola 👋
¿En qué podemos ayudarte?