Las emisiones navales, reguladas por la UE
Los barcos siguen siendo un medio de transporte con mucha importancia en la economía mundial. Tanto, que las emisiones de CO2 entre los años 1990 y 2007 a causa del trafico marítimo aumentaron en un 48% y se prevé, que si no se toman medidas eficaces, su huella de carbono aumente otro 50% para 2030. Estos datos han llevado al Europarlamento a la aprobación de una nueva directiva para el control de trafico y las emisiones de grandes buques.
Entrará en vigor en 2018
La nueva directiva, que aún debe ser aprobada por el Consejo Europeo para ser oficial, regulará las emisiones de gases efecto invernadero en barcos de más de 5.000 toneladas, se aplica a estos buques debido a que son los causantes del 90% de las emisiones por transito marítimo a nivel mundial. Quedan excluidos de su cumplimiento aquellos navíos con fines militares, de pesca y no comerciales que sean propiedad de los estados miembros.
Esta directiva, aprobada el pasado 28 de abril, deberá entrar en vigor el 1 de enero de 2018 y será de gran ayuda en la reducción de la huella de carbono en un sector que no estaba incluido en los planes de la Unión Europea para su reducción.
Registro obligatorio de emisiones
La normativa no se aplicará exclusivamente a los navíos registrados en la Unión Europea, si no a todos aquellos que transiten en aguas comunitarias.
En ella se establece que todos los buques que se vean sujetos a la misma deben tener un sistema de monitorización, notificación y verificación de emisiones de gases efecto invernadero. El objetivo de este sistema es la obtención de información, como puede ser la eficiencia de los motores o el consumo de combustible; algo que ayudará a su vez a reducir los gastos de explotación. En este aspecto, BlacktoGreen ofrece su dilatada experiencia como consultora en análisis de huella de carbono para el cálculo, reporte y comunicación de las nuevas exigencias europeas.
De esta manera será obligatorio que, cuando un barco atraque en un puerto europeo, se registren las emisiones producidas en el trayecto comprobando si se cumplen los valores exigidos. Los armadores cuyos barcos cumplan las normas acerca de la notificación de emisiones obtendrán un documento que lo acredite, una vez se haya realizado una verificación por un organismo independiente. El navío deberá tener el documento siempre a bordo, pudiendo ser objeto de inspecciones por cualquiera de los Estados miembro que tendrán la capacidad de la imposición de penas para aquellos que no cumplan la normativa.
Con la aprobación de esta directiva, Arias Cañete -comisario europeo de Acción por el Clima- afirma que la Unión Europea está adquiriendo un compromiso claro en la lucha contra el cambio climático, además de enviando una «señal muy importante» con vistas a la próxima Cumbre de París.